Por más cuidado que prestemos a la hora de cocinar, la campana extractora es un lugar donde la grasa se acumula sin remedio, especialmente en las rejillas. Los productos específicos para la limpieza de campanas de extracción son caros y, además, suelen desprender un olor muy fuerte que impregna la cocina durante días. De esta manera, limpiar el extractor no es una tarea fácil, pero siempre existen trucos que pueden hacerla más llevadera, así que desde unComo.com te contamos cómo limpiar la campana extractora fácilmente.

Necesitarás:

Instrucciones:

  1. Antes de empezar a limpiar la campana de extracción de humos de tu cocina, pon agua con jugo de limón a hervir en una olla con la campana encendida, para que el vapor suba y reblandezca la grasa que ha quedado incrustada en las rejillas de la campana.
  2. Desconecta o desenchufa la campana extractora de la toma de corriente eléctrica para poder limpiarla sin ningún tipo de riesgo.
  3. Retira las rejillas de la campana y rocíalas con el producto antigrasa que utilices habitualmente en tu cocina y déjalo actuar durante unos minutos.
  4. Limpia el interior de la campana con una bayeta o estropajo suave, impregnado del mismo líquido quitagrasa o del jabón de lavar los platos.
  5. Para limpiar las rejillas, ayúdate de un cepillo para retirar los restos de grasa. Acláralas con abundante agua caliente y déjalas secar.
  6. Cuando se hayan secado por completo las rejillas de la campana extractora, vuelve a montarlas y ya tendrás la campana de tu cocina limpia durante un tiempo.